Los resultados de un ensayo aleatorio controlado (RCT) confirman que la suplementación con vitaminas del grupo B puede tener un efecto dependiente a la dosis sobre la salud cognitiva y la prevención de enfermedades.
Esto supone un importante respaldo al uso de suplementos de vitaminas del complejo B, dado que un ensayo aleatorio controlado (RCT) proporciona la evidencia médica más convincente, y se considera que es la manera más confiable de saber si una determinada prueba o tratamiento funciona.
Vitaminas del grupo B
Un dieta rica en vitamina B es altamente recomendable para una función cognitiva y física óptima. La insuficiencia de vitamina B se ha vinculado con el aumento de los niveles de estrés oxidativo y la inflamación neuronal, indicada por el aumento de homocisteína plasmática en sangre.
Al mismo tiempo, sin embargo, se sabe poco sobre los biomarcadores neuronales de estrés oxidativo, como se ha cuantificado a través de la espectroscopia magnética de protones (1H-MRS, por sus siglas en inglés), y la relación entre la sangre y los biomarcadores neuronales tampoco se ha estudiado en profundidad.
En base a esto, los investigadores de la Universidad de Swinburne y el Hospital Austin en Melbourne (Australia) llevaron a cabo un RCT para evaluar el impacto directo de seis meses de suplementación con una dosis elevada de vitamina B sobre los biomarcadores metabólicos sanguíneos y neuronales.
Reclutaron a 32 adultos sanos (12 hombres y 20 mujeres) con edades comprendidas entre los 30 y 65 años. Les proporcionaron una formulación de vitaminas del complejo B o placebo que contenía una pequeña cantidad de glucosa y riboflavina (2 mg de B2).
Cada participante tomó dos tabletas al día, una en el desayuno y otra en la comida, durante seis meses. Los investigadores realizaron una serie de tests de sangre, incluyendo tests para las vitaminas B6 y B12, niveles de folato y homocisteína al inicio y al final del ensayo.
También realizaron una 1H-MRS de la corteza cingulada posterior (CCP) y la corteza dorsolateral prefrontal (DLPFC) en los participantes del estudio antes y después de la suplementación.
Los resultados mostraron que los grupos suplementados experimentaron un aumento de los niveles de vitamina B6 y B12 en el plasma sanguíneo así como una reducción de la homocisteína en el plasma sanguíneo. Aún así, no había cambios en el grupo de los niveles de folato.
Además, los investigadores observaron relaciones significativas entre la vitamina B6 y N-acetil-L-aspartato (NAA, la segunda molécula más concentrada del cerebro), la creatina y la colina, así como entre la vitamina B12 y la creatina.
También descubrieron que en el grupo suplementado, el NAA de la CCP aumentó, aunque no de una manera estadísticamente significativa.
Los mecanismos de las vitaminas
Además, anotaron que aunque las vitaminas B6 y B12, junto con el folato, normalmente trabajaban de forma conjunta para el mantenimiento de la salud cardiovascular, neuronal y psicológica mediante la regulación de la homocisteína, los resultados sugerían que los niveles más altos del plasma sanguíneo de las vitaminas B6 y B12 fueron los responsables de la reducción de los niveles de homocisteína en el plasma sanguíneo.
Añadieron que debido a que las enzimas dependientes de vitamina B6 y B12, cistationina B-sintasa y metionina sintasa, respectivamente, condujeron a la catálisis de homocisteína, la suplementación con un multivitamínico de dosis elevada de vitaminas B podría “promover la descomposición de la homocisteína en mayor medida que el folato aislado”.
Sin embargo, muchos productos alimenticios vendidos en Australia, como el pan o la leche, ya están reforzados con folato y esto podría explicar por qué los participantes experimentaron cambios mínimos en sus niveles de folato de los glóbulos rojos.
Se requieren investigaciones adicionales
Los investigadores reconocieron que la pequeña muestra del estudio era una limitación y, por ello, dijeron que los resultados se interpretarían mejor como “hallazgos preliminares que justifican investigaciones adicionales con una muestra mayor”.
Declararon que este era el primer estudio en haber evaluado la eficacia de la suplementación con un multivitamínico con una dosis elevada de vitaminas B en la regulación de la relación entre los biomarcadores neuronales y sanguíneos del estrés oxidativo.
En conclusión, escribieron: “La suplementación con una formulación que aporta dosis elevadas de las vitaminas del grupo B demostró reducir los marcadores sanguíneos para el estrés oxidativo (homocisteína) e incrementar los marcadores cerebrales para el metabolismo oxidativo y la mielinización, pero no el metabolismo energético o de la membrana celular”.
“El aumento de los niveles sanguíneos de vitaminas del grupo B también se relacionaba con el aumento del metabolismo neuronal. Estos hallazgos sugieren que la suplementación con una dosis elevada de vitaminas del grupo B podría ser eficaz en la reducción del estrés oxidativo y la inflamación a través del aumento del metabolismo oxidativo y podría promover la mielinización, el metabolismo celular y el almacenamiento energético”.
“En conjunto, estos hallazgos resaltan la importancia de las vitaminas B en el mantenimiento de la salud cerebral en adultos sanos y pueden tener implicaciones importantes en la prevención y alivio de las enfermedades y discapacidades”.
Referencias
Ford TC, Downey LA, Simpson T, McPhee G, Oliver C, Stough C. The Effect of a High-Dose Vitamin B Multivitamin Supplement on the Relationship between Brain Metabolism and Blood Biomarkers of Oxidative Stress: A Randomized Control Trial. Nutrients. 2018 Dec 1;10(12). pii: E1860. doi: 10.3390/nu10121860.